Vale, esta es de esas
cosas que no te esperas y tampoco te imaginas, pero que cuando te lo cuentan
tiene todo el sentido del mundo. Y es que el siguiente vídeo te abre los
ojos y te hace ver que, cuando te lo propones, las barreras desparecen.
Cuenta el caso de una
persona que usa Instagram para hacer y compartir sus fotos. Hasta aquí todo
normal, lo que sorprende es que esa persona es invidente. Sí, sí, completamente
ciega de nacimiento. Y entonces surgen las preguntas: ¿cómo usa una pantalla
táctil alguien invidente?, ¿puede hacer fotos?, ¿cómo sabe qué está
fotografiando?, y, sobre todo, ¿por qué un ciego hace fotos si no puede disfrutar
de ellas?
Lo mejor es que veas al
protagonista contar su experiencia. (Vídeo en inglés)
¿Qué te parece? A mi desde
luego me ha hecho pensar. El tío coge la cámara, apunta a lo que tiene delante
y hace una foto, así de simple. Sabe lo que fotografía porque es consciente de
su entorno, pero no sabe cómo queda la foto, y tampoco le importa. Porque aquí lo
que importa es contar lo que te pasa, compartir la vida.
En definitiva, Instagram le
sirve para compartir sus experiencias e integrarse con el resto del mundo,
dejando unas imágenes bastante graciosas por el camino.
Lo que te decía, las
barreras están donde tú las veas.
Me enteré aquí.
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