15 diciembre 2015

Bye bye bistec



¿Te acuerdas de qué comiste antes de ayer? ¿O la semana pasada? Me apuesto una cena a que no.
Es curioso que no nos acordemos de algo que es tan necesario como placentero. ¡Y mira que lo hacemos todos los días! Tal vez por eso nos es tan difícil recordar nuestras comidas pasadas. Al fin y al cabo comer es necesario, memorizarlo no.

Pero si te pregunto qué quieres comer mañana, seguro que lo tienes más claro. Aunque, a lo mejor, lo que quieres comer el día de mañana y lo que realmente comerás puede ser muy diferente. ¿Cuánto de diferente? ¡Ni te lo imaginas! Muchos problemas acechan a la industria alimentaria, desde la inmensa cantidad de recursos y deshechos involucrados en la producción cárnica, hasta el desfase en el crecimiento de población en relación a la generación de alimentos. Queremos mirar hacia otro lado, pero la cosa está clara: nuestro modelo de producción y consumo de alimentos no es sostenible.

Ya lo dijo la ONU, que nos advierte de la necesidad de dirigirnos hacia una dieta vegetariana. Sin embargo, puede que haya otras soluciones más creativas. Y también más redondas, concretamente con forma de albóndiga.

Albóndiga crujiente de bicho – Comer insectos es habitual en la mayor parte del mundo, más de 1.000 especies diferentes se comen en el 80% de las naciones. Los insectos tienen más proteínas y menos grasas que las carnes tradicionales, y tienen una absorción de nutrientes 20 veces mayor.

Albóndiga de semillas – Cereales, legumbres y frutos secos son una gran fuente de proteínas y micronutrientes. Además, gracias a la selección con nuevas tecnologías podremos obtener nuevas variedades que incorporar en nuestro menú.

Albóndiga impresa en 3D – La impresión de alimentos en 3D puede revolucionar la producción de alimentos y salvar el medio ambiente a la vez, convirtiendo ingredientes alternativos en deliciosos platos. Además, abre una nueva puerta a la personalización tanto de los nutrientes como de su presentación.

Albóndiga de algas verdes – Las algas son las plantas con el crecimiento más rápido y constituyen una gran fuente alternativa de vitaminas, proteínas y minerales. También pueden ser cultivadas sin necesitar gran cantidad de tierra o agua. Por eso tienen un increíble potencial como fuente alimenticia.

Albóndiga de súper polvo – La comida en polvo ha ganado popularidad últimamente. La sustitución de alimentos está disponible tanto en forma líquida como en polvo, e incluye todos los elementos de una dieta saludable. A día de hoy, esta clase de productos altamente nutritivos se han convertido en una solución para combatir la malnutrición en países en desarrollo.

Albóndiga de huerto urbano – Más y más gente se está apuntando a cultivar su comida de forma local. Esta alternativa a la comida global reduce el transporte, ofrece productos frescos de temporada, genera empleos, crea zonas verdes y fortalece las comunidades combatiendo el cambio climático.

Albóndiga del increíble remanente – Según las Naciones Unidas, hasta una tercera parte de los alimentos producidos son desaprovechados, mientras podrían combatir el hambre de los países pobres y preservar el medio ambiente. Reducir este malgasto es un factor crítico para asegurar suficiente comida para una población en rápido crecimiento.

Albóndiga de carne artificial – La carne artificial es un producto animal creado dentro de un laboratorio. La primera hamburguesa artificial se presentó en 2013 y costaba 325.000 $. Hoy, la misma hamburguesa cuesta solo 10 $. Por lo tanto la carne artificial es una vía alternativa a la insostenible ganadería industrial.


Estas son las recetas que podríamos estar comiendo en los próximos años según Space 10. Un laboratorio sobre la vida en el futuro que utiliza ingredientes alternativos, innovaciones tecnológicas y optimiza modelos de producción en sus albóndigas conceptuales. Una forma de concienciarnos sobre este gran reto alimenticio, mientras abre nuestra mente a toda una nueva serie de posibilidades culinarias.

Así, a palo seco no sé, pero con salsa no tendría problema en probar cualquiera de ellas.
¿Y tú? ¿Serías capaz de probarlas todas?

Lo descubrí aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario